La excavación en el Castro de San Lourenzo termina con nuevo conocimiento sobre el yacimiento
El equipo arqueológico dirigido por Xurxo Ayán está más cerca de completar la historia del Castro de San Lourenzo en Cereixa, A Pobra do Brollón, tras finalizar la que fue la octava campaña de excavación en el yacimiento.
La campaña fue promovida por la Asociación Vecinal María Castaña de Cereixa con el aval científico del Instituto de Història Contemporânea de la Universidade Nova de Lisboa y el Instituto de Ciencias del Patrimonio del CSIC.
Se desarrolló del 1 a 12 de agosto con el apoyo de 11 participantes del quinto Campo de Voluntariado internacional, realizado gracias a un convenio entre el Ayuntamiento de A Pobra do Brollón y la Dirección General de Juventud de la Xunta de Galicia.
Una monumental muralla de cuarcita
El principal objetivo de la intervención fue ampliar el área de excavación entre la ábside de la iglesia y la muralla. El equipo encontró la cara interna de la muralla, un muro monumental de 4 metros de alto realizado con un zócalo de cimentación y con una estructura en talud con varios tramos diferenciados. Como particularidad, está realizada en piedra seca con piedras de cuarcita, siendo uno de los pocos ejemplos en el noroeste peninsular de murallas castreñas realizadas con este material.
Aparte de la monumentalidad de la muralla, que tendría 8 metros de ancho, llama la atención el excelente estado de conservación. “A lo largo de los novecientos años desde que se abandona como castro hasta que llega la gente medieval, se fue creando una serie de depósitos de arcilla y de arena que protegieron el paramento, por lo que apenas hay derrumbes y se conserva realmente intacto,” explica el arqueólogo director Xurxo Ayán.
Una joya prerromana
Además de la zona de muralla, también se excavó parte de estructuras castreñas vinculadas probablemente a la industria metalúrgica del hierro. Fue en el entorno de estas estructuras donde aparecieron 23 cuentas de collar o de pulsera, algunas hechas en hueso, otras en lo que seguramente sea pasta vítrea.
“Se trata de un hallazgo excepcional en el contexto de los castros gallegos. Probablemente tengamos la pieza entera y es claramente prerromana, del siglo II o I antes de nuestra era.” comenta Ayán con respeto a la joya.
Conciendo la historia de la vida y de la muerte en el Castro
En cuanto a la historia más reciente del yacimiento, la época medieval, el equipo desenterró en el límite oriental de la capilla de San Lourenzo una serie de tumbas infantiles correspondientes al siglo XII, justo antes del abandono de la necrópolis.
A diferencia de otras campañas, apenas aparecieron restos óseos en las tumbas, aunque sí carbones que ayudarán a datar con mayor exactitud los enterramientos. Como cuestión a destacar, se reutilizaron en la construcción de las tumbas materiales castreñas, como restos de molinos barquiformes y losetas.
La recuperación de la historia del Castro de San Lourenzo se completó con la V Romería de San Lourenzo, una iniciativa ligada al proyecto arqueológico en la que se recupera la tradición de llevar el San Lourenzo desde la iglesia actual de Cereixa hasta el castro.
“Superamos la inercia provocada por la pandemia para celebrar con éxito esta fecha, que es una parte esencial del trabajo comunitario de recuperación patrimonial que estamos haciendo en la parroquia” comenta Xurxo Ayán.
